En las pesquerías hay una larga tradición de implementación de prácticas sostenibles, sin embargo, en la acuicultura, el concepto de prácticas sostenibles es más reciente, por lo tanto existe la necesidad de metodologías para evaluar su sostenibilidad.
Los Indicadores de Desempeño de la Acuicultura (en inglés API) evalúan los aspectos de sostenibilidad económica, social y ambiental de la producción acuícola. Estos indicadores se basan en la definición de sostenibilidad de “triple bottom line”. Esta definición de sostenibilidad afirma que las actividades económicas deben considerar aspectos sociales y ambientales además del aspecto de la rentabilidad económica. Sin embargo, la sostenibilidad es un concepto complicado y todavía no hay consenso sobre su definición.
Discusión de estudios de casos
Actualmente, los investigadores del programa colaborativo de la red EfD “Blue Resources for Development”, BlueRForD, están aplicando la metodología API para analizar el desempeño de las actividades acuícolas en diferentes sectores y países. Los investigadores se reunieron en Cartagena, Colombia, en marzo de 2023, para discutir los resultados preliminares de una serie de estudios de caso en África, América Latina y Asia, donde están aplicando la misma metodología y procedimientos. Su objetivo principal es comprender el impacto ambiental de la acuicultura en los países seleccionados, por ejemplo, las externalidades negativas relacionadas con el impacto genético en las especies, los efectos del escape de los peces a los ambientes locales, los efectos de las enfermedades de los peces, la distribución de los desechos, el uso del agua y los costos de la alimentación.
Aportes del gremio colombiano de acuacultura (Fedeacua)
Durante esta reunión, los investigadores también discutieron y recibieron aportes a su investigación de Mónica Vásquez, coordinadora de sostenibilidad de Fedeacua, que es el gremio colombiano de empresas privadas en acuicultura. Mónica hizo comentarios sobre las preocupaciones de los productores sobre la sostenibilidad de la acuicultura y dijo que la metodología API complementa los criterios de sostenibilidad de los productores acuícolas en Colombia. Al final de la reunión, Jorge Marco Renau, quien lidera un proyecto de investigación para el estudio de caso de la tilapia de peces en Colombia, comentó: "comprometernos con Fedeacua nos ha permitido establecer contacto directo con los productores acuícolas y las partes interesadas en Colombia, y el gremio también nos está proporcionando información clave para avanzar en nuestro objetivo de evaluar el desempeño de la acuicultura".
Amenazas al medio ambiente
Desde la perspectiva de la acuicultura, Colombia tiene muchos desafíos porque el sector acuícola no tiene un protocolo para evaluar la sostenibilidad de sus actividades. Si la acuicultura se lleva a cabo sin estándares de sostenibilidad, existen muchas amenazas ambientales. En este país, la actividad acuícola ha crecido sin control durante los últimos 30 años causando la pérdida de manglares, contaminación del agua y conflictos por el uso de la tierra y el territorio. Hasta ahora, el único enfoque de sostenibilidad que tienen las empresas acuícolas son los requisitos de calidad de los Estados Unidos y la Unión Europea para recibir sus exportaciones de pescado. Jorge Marco Renau comentó: "hasta donde sabemos, seremos los primeros en Colombia en hablar sobre la sostenibilidad en la acuicultura utilizando evidencia científica".
Después de la reunión en Cartagena, él y Nicolás Valbuena fueron al Huila, que se encuentra en la región centro-sur de Colombia en el valle del río Magdalena. Allí, realizaron entrevistas a los dos mayores productores y exportadores de tilapia en Colombia, y a pequeños productores, con el objetivo de comparar el desempeño de sostenibilidad entre la producción orientada a la exportación y la producción orientada al consumo doméstico en Huila, un centro acuícola emergente en Colombia.